Si un hombre sueña y se ve a sí mismo soñando un sueño en el que se ve a sí mismo en un espejo viendo que el corazón es aceite que cabalga la sangre, como una cubierta hacia la cual se aproxima, sus huesos como un barco y su estómago tensado en una vela en la corriente de su aliento, si éste es su ojo en el espejo viendo su ojo en el sueño viéndose en el espejo en el que ve su ojo viéndose en un sueño en un espejo, su rostro reflejado en aceite y que se arruga de vez en cuando en la corriente de su aliento, el espejo fluirá y el corazón se dispondrá como vidrio en el marco de sus huesos en las paredes de su aliento, su sangre tan fina como el papel y la plata, en un sueño en el que se ve viéndose en un espejo viendo que los huesos flotarán y el corazón se conmoverá, sus huesos en su garganta y su estómago tensado como una vela en la corriente de su aliento, su sangre llena de vidrios rotos y su rostro como un papel rasgado viéndose en el espejo de su corazón que se desperdiga como aceite en el espejo de su aliento.
- Poesía canadiense