Se hunde el corazón lo sé porque aquí están aún las estrellas en mis pechos la otra serpiente subiendo a punto de agarrar mi tercer ojo calentando mi propia lengua deseando que la muerte me pudiese asustar tanto como el amor.
Antología confidencial
Se hunde el corazón lo sé porque aquí están aún las estrellas en mis pechos la otra serpiente subiendo a punto de agarrar mi tercer ojo calentando mi propia lengua deseando que la muerte me pudiese asustar tanto como el amor.